viernes, 20 de abril de 2007

Sobre el Rankismo.

Entre David de Ugarte, Pablo Mancini y Luis Ramirez se ha generado un interesante debate disparado por las riquísimas tesis del primero sobre rankismo. Siempre haciéndonos pensar y repensar posicionamientos.
La concepción del Ranking sería ontológicamente contraria a la diversidad propia de la blogsfera, ya que el mismo toma al todo como una sola red, siendo el blogstar el personaje hegemónico que ejercería una lógica particular de Poder-Sobre, en términos de Toni Negri. Efectivamente, se trata de un intercambio donde subyacen concepciones ideológicas sobre el Poder no contrarias, pero sí diversas, con tratamientos diferentes.
Tomando como premisa que queremos formas de participación cada vez más abiertas y democráticas, es interesante lo que plantea Luis Ramirez en relación a la (in)capacidad real del rankismo para modificar la arquitectura participativa de la blogsfera. Ahora bien, también es para pensar si la existencia de hecho de personas más dinámicas en la blogsfera es necesariamente, intrínsecamente antagónica con nuestros objetivos. Qué sucede con actores que concentran referencia en su persona y sin embargo generan una cada vez mayor inclusión en el ámbito de la blogosfera, sea en términos cuantitativos como cualitativos? Acaso no existen, también, figuras que más allá de su individualidad manifiestan formas de pensar, subjetividades colectivas? No hay quienes, por cierto, más allá de su particularidad generan mayores niveles de organización generales? De muy diversas formas, el Che, Lennon o Gandhi -por dar algunos ejemplos de carne y hueso que han generado tremendas redes sociales- son figuras positivas, suerte de mitos que movilizan saberes y sentires populares. Síntesis. Nuevas figuras se van generando en esta nueva etapa con similares características.
Entendemos que la diversidad hay que defenderla como postulado básico de procesos transformadores, democratizadores. A su vez, la unidad en la diversidad garantiza una relación de fuerzas que posibilite esos mismos procesos.
El rankismo posiblemente funcione de forma retardataria con las nuevas formas de intersubjetividad que queremos construir, pero esto no implica que los colectivos deban perder espacio frente al individuo. El individuo, de hecho, se libera con otros, colectivamente. Esto de alguna forma debe poder contemplarse en la estructura de las redes y subredes que se vayan configurando, para que la emulación comunitaria funcione como incentivo para el conjunto, que así se vea beneficiado.
Para seguir(nos) pensando... Demasiado estímulo implican estas discusiones para que nosotros podamos cerrarlas. Sobretodo pensando que, concretamente, estamos construyendo lo que planteamos, materializando ideas en un mundo que recién está empezando.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicidades a ti! Panal es un proyecto que realmente merece la pena!!

Por cierto que ya andas por mi feevy :-D